El Derecho en tiempos de Covid-19
En verdad podemos declarar que, en el marco de la incertidumbre vivida por esta pandemia y sus consecuencias en el Mundo; seguramente en estas circunstancias, es fundamental precisar que el ser humano realmente; teniendo en cuenta, los avances tecnológicos y de conocimiento, como el sinnúmero de innovaciones y evoluciones demostradas en los diferentes cambios exponenciales que día a día presenciamos; no cabe duda, que somos los seres especialmente más vulnerables que existen sobre la faz de la tierra; sujetos intrínsecamente a la fuerza de la naturaleza; está, sin otro motivo más que haciéndonos un llamado a la reflexión.
Teniendo en cuenta la tarea titánica y el compromiso de las autoridades, con el fin de preservar la vida de todos sus habitantes; lo cual, nuestros admirados profesionales en derecho cumplen a cabalidad; trascendentalmente estamos cursando un momento atípico, donde nos hemos dado cuenta el valor que tiene el integrar un asunto legal en un escenario judicial, donde todos los participantes compartimos cada una de las experiencias tanto en el estrado como fuera de él, en algunas ocasiones presenciadas acaloradamente por diferencias en el apreciar, deliberar y desde luego con diversos resultados del proceder; dirimiendo los diferentes temas que surgen, como demás información a tratar, con el único fin de escuchar las disímiles aristas de cada uno de nuestros grandes profesionales de la ciencia jurídica, lo cual resulta gratificante. Recibiendo una enseñanza en cada encuentro, desbordándonos de energía y fortaleciendo a cada uno de los integrantes de está tan respetada profesión; multiplicándole en nuestras familias y a todo cliente que vemos en necesidad en búsqueda de la verdad.
En el marco de no saber cuándo, y como saldremos de esta encrucijada, debemos reflexionar sobre todo lo que nos rodea, nuestra forma de Sentir, Pensar y Actuar, el recibir la alternancia entre la presencialidad y la virtualidad; debida cuenta que, estaba tomando posición desde hace mucho tiempo, así; desde luego, sentado por medio de la globalización; por ello; el “Nuevo Mundo” - “Cambio de conductas” como muchos lo están catalogando; no es solo tomar distanciamiento social, llevar tapabocas y no salir de casa, es realmente; comprometernos a realizar un verdadero cambio desde nuestro interior; para lograr una paz espiritual, lo cual nos llevará a prestar una mejor atención a cada interesado en nuestro servicio, no simplemente con nuestros semejantes sino también, con todo el entorno; ya que nadie puede bajarse de este Mundo, todos estamos intercomunicados, independientemente de su posición económica, social o costumbres; donde observamos una interdependencia del debido cuidado de los demás y el propio; recordándonos el vínculo tan estrecho que tenemos los Seres Humanos.
Esta experiencia, me ha afianzado el valor que tiene la confianza, la esperanza, la vida; el respeto por la naturaleza, la forma de tomar mejores decisiones con carácter de inmediatez; la consideración por el otro y que, al estar detrás de una pantalla, puedo sentir, el calor, afecto y unión de todos y cada uno de ustedes, mis estimados colegas.
Estos momentos, donde hemos compartido por medio de audiencias virtuales, agradezco al todo poderoso. Porque se ha cumplido el objetivo de permanecernos unidos en armonía; donde la solidaridad es uno de los factores de suma importancia, que siempre hemos solidificado, del que estoy seguro permanecerá por siempre…
No cabe duda que de esta crisis saldremos victoriosos; ella no podrá sostenerse en el tiempo; para luego continuar el camino legal del sistema judicial que presenta en este orden nuestro país, sin olvidar que a las nuevas generaciones de abogados les contaremos nuestras vivencias, estrechándonos en fuertes abrazos, grandes sonrisas y contendiendo todas las cuestiones a tratar; en aras de nuestra construcción permanente para el futuro; poniendo en práctica nuestra Libertad, igualdad y fraternidad, en la mejor profesión del mundo que es… El Derecho.
Gustavo Adolfo Bello Estrada.